Reseña
Las autoras parten del trabajo que han realizado en Barcelona y en París con niños sordos y con aquellos niños cuyos padres han debido emigrar de sus países de origen, perseguidos por la violencia o el hambre. A diferencia de otro tipo de estudios, hacen hincapié en la importancia que tienen los tutores invisibles, que trabajan a la par de los educadores y contribuyen a la integración de estos niños en la sociedad. La labor específica de cada uno de los agentes es fundamental durante un proceso terapéutico de acompañamiento, cuya finalidad es «apoyar, desarrollar y profundizar» las potencialidades de cada uno de los niños.