Reseña
Este libro ofrece un estudio documental y gráfico de la línea férrea entre la estación de Selgua ( en el trayecto Zaragoza- Barcelona por Lérida) y Barbastro, dentro de la provincia de Huesca.La propuesta inicial de implantar un tranvía de fuerza animal derivó rápidamente en la construcción de un ferrocarril que diese salida a la producción agrícola y ganadera de las comarcas prepirenaicas.
Los emprendedores de esta aventura tuvieron grandes dificultades desde 1861, hasta que finalmente se inaguró el ramal en 1880. Durante los noventa y cinco años de su existencia circularon numerosos trenes gracias al esfuerzo de los trabajadores y sus familias, repartidos por las estaciones de Selgua, Castejón del Puente y Barbastro.Los viajeros habituales dieron en los últimos años el apelativo cariñoso de "la Burreta" al material rodante de la línea. Asimismo, el comercio local y comarcal estableció una relación económica sin precedentes con otros mercados nacionales.
Las obras hidroeléctricas del Pirineo, el traslado de hidrocarburos, las ferias de ganado y la logística militar son ejemplos del movimiento que soportó esta línea ferroviaria altoaragonesa. Todo ello está acompañado por una interesante colección de imágenes para el recuerdo.