Reseña
Los avances que en los últimos años se han conseguido en el estudio del tratamiento del cáncer han modificado sustancialmente el perfil clínico y pronóstico del paciente oncológico, así como los aspectos terapéuticos y asistenciales. Desde la perspectiva psicosocial, una filosofía asistencial que sólo planteaba la atención a los aspectos emocionales del enfermo moribundo, ha dado paso al desarrollo de áreas tan importantes como la psicoinmunología, la calidad de vida del paciente, el abordaje y tratamiento de las complicaciones psiquiátricas que surgen en el curso de la enfermedad, el estudio de los mecanismos del dolor, los cuidados paliativos, las estrategias psicológicas y de afrontamiento del cáncer, los aspectos psicosociales, etc.
Todo ello confirma el cuerpo de la doctrina de la Psicooncología, que se plantea dos objetivos fundamentales: por un lado el estudio del impacto del cáncer sobre los aspectos psicológicos del paciente y su entorno, y por otro el análisis de las variables psicológicas y conductuales que pueden ser factores de riesgo.