Reseña
Para vivir en Libertad hay que educar la libertad. El mundo es confuso, está lleno de opciones, y los niños y los adolescentes-tienen que tomar decisiones en las que siempre existe el peligro de dimitir y dejar que su vida la elijan otros. Educar en libertad comienza por hacer descubrir a los adolescentes que tienen una v ida propia en sus manos, y luego continúa por enseñarles a deliberar, a pensar antes de tomar una decisión de la que luego se I -pueden arrepentir. Los adultos no tenemos derecho a imponer a nuestros alumnos ni a nuestros hijos nuestras ideas, nuestras concepciones ni nuestros proyectos de vida; sin embargo, tenemos hacia ellos una responsabilidad educativa: la de iniciarlos en aquellos-valores que sabemos que dan::calidad a la vida humana y en advertirles que determinados comportamientos nos degradan como personas. Y, para ello, debemos ser fieles a aquellas experiencias claves en las que hemos descubierto una mejor forma-de vivir y-- a aquellas otras que jamás querríamos que se repitieran. Por eso,educar es un compromiso con la memoria