Reseña
La globalización, con su fluidificación de las fronteras, nos exige elaborar una agenda feminista global acorde con sus exigencias. Los movimientos queer ponen en cuestión las fronteras entre los géneros, llevando a debate este mismo concepto; en los países que han sufrido la colonización de Occidente se genera un feminismo con modulaciones propias, el feminismo poscolonial; los ecofeminismos dan forma a la convergencia de ciertas perspectivas feministas y la problemática ecológica; la feminización de los flujos migratorios vuelve apremiante la contrastación de los Derechos Humanos de las mujeres con el fenómeno de la multinacionalidad.
Nuestro acceso a las nuevas tecnologías (ciberfeminismo) nos implica en alianzas con nuevos sujetos emergentes y las nuevas relaciones entre capital y trabajo en la era global están implantando un nuevo orden del género: la teoría feminista se está haciendo cargo, así, de un material ingente de reflexión.