Reseña
Se reúnen en este libro diez investigaciones sobre el proceso de federalización del Partido Socialista Obrero Español en los años inmediatamente anteriores y posteriores a la muerte de Franco, partiendo de un modelo muy centralizado. Desde 1970, un núcleo de dirección compuesto mayoritariamente por jóvenes del País Vasco y Andalucía, con el apoyo de la segunda generación del exilio, emprendió la reestructuración de las organizaciones socialistas históricas. Aunque el proceso de implantación organizativa fue homogéneo en su despliegue, recibió influencias de otras culturas políticas que fue asimilando en el curso de la Transición. La existencia de otras alternativas socialistas como el Partido Socialista Popular de Enrique Tierno Galván o la Federación de Partidos Socialistas (FPS), que aglutinaba a grupos pequeños pero activos y altamente cualificados en zonas geográficas como Madrid, Barcelona o Valencia, incidió en la trayectoria política y organizativa del partido. A la conversión del PSOE en un partido federal se unió la construcción del Estado de las Autonomías, lo que trajo consigo una transformación del modelo organizativo del socialismo español. A partir de los años noventa del siglo XX, los líderes territoriales adquirieron un creciente peso frente al núcleo central.