Reseña
Bien podría ser un cuento chino por su singularidad, pero es la historia real de Huang Masai. Su nombre se convierte en Marcela de Juan como transcripción libre de Masai, y de su apellido paterno, Hwang. Hija del embajador de China en Madrid, lejos de pasar desapercibida, atraía amistades de toda índole: Pío Baroja, y Emilia Pardo Bazán, Mariano Benlliure o los políticos José Canalejas y el conde de Romanones.